domingo, 19 de febrero de 2012

Bache

¿Creer en el destino? quizás sea complicado hacerlo, creer que todo sigue un patrón definido. Sin embargo, muchas veces, situaciones irónicas llenan completamente tu vida. Situaciones que, en muchos casos, llenan de felicidad, o al menos sorprenden para bien. No en mi caso. Duele ver como cada sorpresa que me llevo es un nuevo bache. Descompone por dentro ver que la vida se derrumba. Una vez más.
Estás cansado. Cansado de vivir otra vez el fin. Darte cuenta de que, quizás, esto ha sido otro momento de relax en tu vida, antes de volver a entrar en la zona bacheada.
Sin embargo, esta vez no quiero volver al pasado. Quizás esta vez haya encontrado un sitio donde podía residir mi felicidad. ¿por qué ahora no? El destino...
Y es que contra mejor es tu reacción frente a la vida, peor es la reacción de la vida contra ti. Y yo ya no sé reaccionar, no sé actuar frente a esto.
Una vez mas, ver rotos los cimientos de mi vida, duele demasiado.
¿Que hacer? Demasiado mal como para seguir viviendo, pero no lo suficiente como para morir.
El idilio es la solución. Vivir por fuera. Morir por dentro. Porque mi interior se queda en los cimientos de mi vida derrumbada. Porque mi corazón se queda a tu lado, ahora y siempre. Se queda donde, por un día, fue feliz.